lunes, 1 de diciembre de 2008

Poemas de Navidad

Las nubes han dejado una estrella
Del cielo bajar
Ilumina y abriga
La humilde morada
Donde dos Ángeles hechos niños duermen,
María y José, hombre y mujer
Se observan con dolor,
Hoy nada pudieron hacer
Para que en el amanecer, la navidad a sus hijos
Una sonrisa, de.

Las manos encallecidas, de tanto trabajar la tierra,
Tiene él,
Ella baja su cabeza de cansancio, sus manos en la sien,
Piensa en las dos casas que tiene que atender.
Esa noche sus patrones una fiesta dan,
Piensa María en la fatiga ,
Pero más le duele saber, que a pesar de su esfuerzo
Nada podrá llevar, de esa alegría que ve.

Silencio, no llores mujer.,
Coge él sus manos temblorosas
Los niños despertarán.
Suspiros silenciosos se dejan caer,
De repente, su cara se ilumina
Sus ojos de alegría se llenan,
Mira con amor el rostro de José,
Que despierten, ¡
Quiero verles sonreír, alzarles en mis brazos,
Besarles con fervor
Y contarles el regalo más maravillo
Que a la tierra llego.

Que regalo?, que te pasa?, que les vas a decir?
Que ellos, la vida son, que les a enviado el mismo Dios,
Que hace dos milenios a su hijo en la tierra dejo,
Y que hoy en su cumpleaños,
Hemos sido bendecidos,
Porque no hay cansancio, ni dolor
Pues a este hogar
De regalo conseguimos el más grande Don,
Son ellos tu y yo,
Esta casa, y este amor
Celebremos,… en esta familia…
Esta Dios.

Premura

Y, el ocaso imaginario esta llegando al fin
El frío no consigue que la piel que me cubre
Calme la ansiedad al adivinar en el aire tu llegada

Más mis labios sienten el dolor que causa
La sequedad, por la ausencia que hiere de tanto esperar
Al que ausente da paso a la soledad.
Haz que la brisa apure tu caminar
Hace tanto que deliro, hace tanto que te sueño

Por fin la luna llena te trae
La lluvia decae lentamente
Y al tocar tus manos, las estrellas brillan
Tú te vuelves colibrí
Tus manos cual alas batientes
Hacen que la flor se abra orgullosa
Hinchada del néctar que ávido libas
Certero, ebrio de pasión
Robando su libertad.


Yo, nada puedo hacer,
No puedo defenderla
Pues cual esclava siento las cadenas invisibles
Y solo quiero que aquella llave tibia
Penetre la cerradura y haga estremecer
Cual tormenta de invierno, abriendo
Rasgando,
Dando paso con premura sutil
Al caudal de tu dulce río
Lleno de crisálidas que quieren ser mariposas…….

Noche

Noche de estival fulgor, lleno de luciérnagas violetas
Donde el amor ronda las avenidas y el llanto de las crisálidas
Se torna ulular de sirenas
Vuelcan las mieles su dulzura
Para llenar de encanto tu arrebolada sonrisa

Cuando llegue al último suspiro
Recordare .
Aquella dulce entrega en que prolongue mi vida
En que prolongue mi ser.
esa noche supe
Que la felicidad existía , que tu eras fuego
Yo frenética danza
Inventamos mil figuras cual coreógrafos profanos
Fundiéndonos, transformándonos
En estampidas salvajes.
Fuimos mar y cielo, una y otra vez
En la cuna de tus brazos me pillo la mañana
Serena,
Quieta
Húmeda
Amada.

Nacimiento

Hoy un niño nació,
Que alegría reina en el corazón,
Un infinito fulgor
Hace que las sombras desaparezcan en la inmensidad.


A la tierra de Fe lleno,
¿Habrá esperanzas al pasar el tiempo?
Este tiempo
De miserias, de guerras, de dolores,


Ya van dos mil años,
¿Cuantos más deberán pasar?
Para que aquél niño de Belén
Vuelva a hacernos creer,
Y el corazón vibrar,
Para que ese sueño,
Que se forjo en aquel pesebre,
Donde Dios a su hijo nos regalo

Se llene de Paz, Alegría y Amor,
Y tu sonrisa ilumine los cielos,
Para olvidar, que cuando naciste, este mundo,
Ni cuna te dio.

Llantos de Otoño

HOY SE ME CAYO EL OTOÑO A PEDAZOS
POR MI ESPALDA RODARON LAS AMARILLAS HOJAS DE LOS ÁRBOLES
AMARILLOS, ROSADOS, CAFÉ Y ROJOS
TODOS JUNTOS DANZARON A MI ALREDEDOR
UN OLOR A TIERRA MOJADA
HERIA MI OLFATO

LA LLUVIA DISIMULABA MI LLANTO
MIS RECUERDOS ME LLEVARON A VERANOS INTENSOS
PRIMAVERAS REVOLOTEANDO, PARECIAN MIS NIÑAS JUGANDO
EL ARCO IRIS PARECE INVISIBLE
ANTE MIS OJOS TRISTES
Y TU ROSTRO SE ME APARECE RISUEÑO, PICARO, PIDIENDO AMOR A GRITOS

TUS OJOS COLOR MIEL INTENSO,
ME HABLAN
RIEN,
LLORAN
ME CUENTAN LAS PENAS QUE NO LLORASTE
Y ME DICEN DE LAS ALEGRIAS QUE VAS CONSIGUIENDO,
MIGUITAS DE AMOR FUISTE RECOGIENDO
HOY TIENES HOGAZAS QUE NI TE IMAGINAS.
SEMBRASTE TERNURA POR DONDE PASASTE
Y HOY COSECHAS VIDES REPLETAS DE VIDA.




JAMÁS MORIRAS,
NO MUERE QUIEN AMA A DIOS COMO T U,
LA MUERTE FRÍA , NO TE TOCARA
NO PUEDE CONTIGO
LA INTENSIDAD CON QUE VIVES EN ESTA TIERRA
HACE QUE LATAN LOS CORAZONES, DE TODOS LOS QUE TE AMAMOS DE VERDAD.

HABRA NOCHES INTERMINABLES,… INTERMINABLES……INTERMINABLES…

Excesos

Los excesos provocan hábitos,
Y tu eres eso,
Como seguirá la vida cuando te escapes de aquí?.
Oye lagarto juancho, como con cariño te llamaba papá
Se que te escaparas, hacia los horizontes infinitos
Que serás la alegría para aquellos, que te esperan con los brazos abiertos.

No veremos tu rostro, pero sentiremos tu risa,
Sentiremos tu aroma en el viento,
Y tu recuerdo estará cada mañana.
En la cama que dormías,
En el escritorio de la oficina,
En ese colectivo viejo que te esperaba
Para llevarte a tu trabajo que amabas.

Para Gabriela serás un dolor eterno,
Pero a la vez alegría infinita de saber que te tuvo como madre.

Recuerdos

Los años pasan, y te vas dando cuenta poco a poco, que los árboles que creías eran verdes, han cambiado de color por enésima vez, los pájaros ya no hacen sus nidos a la altura de tus ojos y los ríos no traían tanta agua como creías.
La distancia entre tu casa y el colegio no era eterna y las manos de tus padres tampoco eran tan grandes.
Se va acercando el ocaso y tus propios brazos no alcanzan para detener a tus hijos, la carrera de estos se vuelve veloz y no entienden que pronto el sol será más tibio, más fría el agua del mar y el cielo tendrá otro color, y que cuando quieran volver hacia atrás, no verán los ojos de aquella que los amo, simplemente por ser como eran, ni verán las lágrimas de emoción, las mismas que derramo, cuando lograron llegar a esa meta que tanto les costo. Hoy el atardecer es más largo y duele más , no hay camino que no se recorriera pensando en ellos, no hay dolor más eterno que el olvido.